El relato estremecedor de la familia de la nena que fue secuestrada en Chimbas

Un verdadero calvario es el que vivió una familia en Chimbas tras la desaparición de Aisha, la nena de apenas 4 años. A la pequeña se la llevaron de la puerta de su casa de Villa Unión, mientras su mamá se bañaba. Fue hallada nueve horas después gracias al testimonio de una verdulera de la zona, quien aportó datos claves para que la Policía de San Juan diera con ella. La familia se reencontró con la menor en la madrugada, en medio de lágrimas y felicidad al verla sana y salva.

“Estábamos desesperados, por suerte los vecinos se portaron muy bien con nosotros, también toda la familia se puso a disposición”, contó la mamá, Celeste Ruiz. La familia denunció la desaparición de la pequeña y acompañó a los uniformados en los rastrillajes por la zona. Contaron que no pegaron un ojo, aun cuando la pequeña volvió a la casa con frio y signos de resfrío luego de haber pasado la noche en una construcción precaria, en medio de un baldío.

“La mujer pasó por la casa la agarró fuerte del brazo y se la llevó, eso fue lo que nos contó la niña cuando le preguntamos qué había pasado, en el cuerpo tiene unos raspones que muestran lo fuerte que la tomaron”, relató Verónica Páez, abuela de Aisha. Y agregó: “Después se la llevaron en colectivo al centro, calculo que fue el 33 por lo que contó después una vecina, incluso afirmaron que no tenía crédito en la sube la mujer que se la llevó, pero una vez que llegaron al centro le compraron una galleta y se la llevaron en un remis el hombre y la mujer”.

 En principio quien secuestró a la nena fue una mujer identificada como Teresa Varela, de 44 años, quien padece alteraciones mentales y hasta hace un tiempo ejercía la prostitución. Pero en el lugar donde encontraron a la nena también había un sujeto, Rodolfo Tejada, de 31 años, quien tiene antecedentes por robo y también quedó detenido por el delito de sustracción de menores. “En el rancho donde estuvo, la pequeña dijo que no le hicieron nada, que solo estuvo tirada en el colchón hasta que sintió los ruidos de que pateaban la puerta y entraba un policía”, cerró la familia.