Hubo muchos cambios en Boca en las últimas semanas. El más determinante ocurrió el domingo 8 de diciembre, cuando en las elecciones el oficialismo cayó a manos del principal opositor: Jorge Ameal.

El histórico dirigente, que ya había sido presidente de Boca entre 2008 y 2011 por la muerte de Pedro Pompilio, llegó junto a Mario Pergolini y Juan Román Riquelme para cambiarle la cara al club.

Este martes se dio una reunión inédita si se analiza todo lo que ocurrió en los últimos años: los presidentes de Boca y River se vieron cara a cara. Rodolfo D'Onofrio y Ameal se juntaron en Puerto Madero para intercambiar ideas.

Los temas que trataron se desconocen. Pero hace algunas horas el propio dirigente Millonario había dicho que se llevaba mejor con Ameal que con Daniel Angelici, el expresidente de Boca.

"Creo que comparto más visiones del fútbol con Ameal que las que tenía con Angelici, cuando nos juntemos, lo podré confirmar, además con Riquelme tengo una buena relación y siempre lo admiré como jugador", había dicho D'Onofrio.

Y agregó: "Es fundamental que en la política Boca y River se lleven bien. Es importante para el bien del fútbol argentino".

Nada es casualidad

La interna entre la AFA y Superliga está al rojo vivo. La política nacional también juega su partido. Desde el Gobierno quieren que el ente que organiza el torneo de Primera desaparezca y que todo vuelva a manos de la casa madre del fútbol argentino.

En este contexto, es muy probable que los dos dirigentes de los clubes más importantes del país hayan dialogado sobre esta situación. Luego del almuerzo, solo se limitaron a decir que iban a trabajar juntos para "construir muchas cosas en común".